Como la etapa era corta, dormimos bastante, nos levantamos algo más tarde que de costumbre (que aun así era temprano), desayunamos tranquilos y salimos buscando seguir con la R1. El paisaje espectácular, con subidas y bajadas que nos permitían disfrutar de valles y colinas.
Una prueba de la amabilidad de la gente: A la salida de Madeingburg, un hombre nos indicó el camino al siguiente pueblo (en plan calle recta, derecha, izquierda, sigue rotonda, y la primera a la izquierda...). Lo curioso es que se fue unos kilómetros más adelante, al cruce de caminos final donde teníamos que desviarnos según sus indicaciones. Allí estaba él, haciéndonos señales como loco!!! Para que no nos pasáramos! La gente se ha portado muy bien con nosotros.
A mitad de camino conocimos a una alemana que estaba haciendo parte de la R1 también y llevaba una pedazo de guía, con indicaciones perfectas. Cuando le enseñamos nuestro mapa (google earth a poca escala y nada de detalle) y le dijimos que con eso veníamos desde Amsterdam, ¡no podía creerselo!
Los últimos 15 kilómetros fueron los más bonitos, desde la foto del caracol en adelante, fue espectacular, principalmente por la mezcla de colores.
Llegamos a Hoxter a muy buena hora, fuimos a Turismo y ahí nos averiguaron un alojamiento, lejos del centro, pero cómodo. Era la casa de una familia también, y como siempre, muy simpáticos y amables. Tenían por vecina a una española de Zaragoza, Encarna, que había hecho su vida en Alemania persiguiendo a su amor.
La ciudad representa la construcción alemana del S.XV en los momentos de esplandor de los gremios y burgueses.
Fuimos a cenar comida alemana en un biergarden (jardín de cervezas). Y atención a la especialidad de la casa: filete empanado con huevo y bacon y patatas cocidas con pescado empanado. Pero estaba bueno, oye! Además había buffet libre de ensalada.
Volvimos a ver a la amiga alemana de antes, creo que no esperaba que llegáramos a Hoxter sin su magnífica guía.
De vuelta "a casa" nos cayó un gran chapetón. Esa noche soñé que al día siguiente no encontrábamos señales ningunas y estábamos perdidos. Me desperté un poco sofocada.
Aquí tenéis las fotos
ETAPA 11 from RafayMarian on Vimeo.
muy interesante! Espero con interés las próximas etapas. Un abrazo desde la ciudad de los reyes prusianos.
ResponderEliminarMuy curioso, la señal del Camino de Santiago. Y esa pedazo de casa con ese pequeño panel solar, menos mal que tienen pocas horas de luz... y aquí como siempre, dependiendo de que nos produzcan la luz y a pagarla.....
ResponderEliminarHola, rafa, por fin he podido echar un vistacillo al blog... buena banda sonora si señor, ahh..y viva el google earth, porque deja en parte trabajar a nuestra imaginación e intuición.
ResponderEliminareva ( NYE)